Entrevista a Diego Fucks en La Nación

Dos programas en sendas frecuencias, bajo el mismo techo
Fucks, entre el desayuno y el almuerzo

Conduce, de 6 a 9, Mil horas por Los 40 Principales, y al mediodía, Competencia, primera edición, por Continental

Por Alicia Petti
Fotografìa: Alfredo Sánchez
Para muchos, Diego Fucks alcanza a diario resonancia y popularidad por su singular participación como panelista en el programa de TV Duro de domar por su estilo verborrágico, su personalidad apasionada y hasta combativa. Luego de 25 años de trayectoria dedicada mayormente al deporte en la prensa gráfica, la TV y la radio, la actualidad encuentra al Chavo Fucks frente al micrófono en un doble desafío de lunes a viernes y bajo el mismo techo: de 6 a 9, por Los 40 Principales (FM 105.5), conduce Mil horas , y por Continental (AM 590) bastonea Competencia, primera edición , de 13 a 14. A diario también continúa con su aparición -destacada por cierto- en el programa que conduce Roberto Pettinato por Canal 13. "Reconozco que vivo un muy buen momento laboral, más que gratificante, porque son tres propuestas diferentes y que me apasionan por igual -dice en el comienzo de la entrevista-. Me interesa destacar Mil horas , porque es un programa que nació en octubre de 2006, planteado como cantar debajo de la ducha, muy placentero, como el desayuno de la mañana muy temprano, porque se emite cuando la gente tiene un día en general muy pesado por delante."

-¿Cómo es Mil horas ?

-Tiene un tono informal y apunta a pasar tres horas divertidas. Quizás aquí radique la diferencia con otros programas de la primera mañana. Tenemos información comprometida y muy precisa, pero básicamente mucho humor, con el formato y contenido que la FM requiere sobre todo desde lo musical: un informativo cada media hora y mucho contacto con el público, que va de los 18 a los 40 años, además de escuchar siempre a los Beatles como primer tema del día. Y todo tiene mucho que ver con la tostada calentita, la ducha, el rico mate, placeres que contrarrestan el hecho de levantarse temprano.

-¿Quiénes lo acompañan?

-Todos se suman a esta suerte de leitmotiv . Romina Calderaro, encargada de la columna política, se supone que es la profesional seria, pero al mismo tiempo es muy divertida. Están Fernando Sanjiao y Natalia Carulias, que provienen del ámbito teatral y practican el humor de stand up comedy. Pablo Fernández en espectáculos, que es muy nuevito en estas lídes, pero hace muy bien su trabajo. Sebastián Núñez en cine, y dos profesionales que hablan sobre mitos urbanos: Guillermo Barrantes y Víctor Coviello. Seguiremos haciendo incorporaciones y hablo en plural porque es un proyecto que estamos llevando adelante con Patricia Buttice, que es la productora general del programa. Estuve casado con ella 12 años; es la madre de mis dos hijos, Patricio y Chano, y estamos separados desde hace cuatro. Pero no perdimos la unión profesional y la comunicación de ideas en cuanto a lo que tiene que ser un programa de radio y este avance que tuvo el programa en los últimos meses tiene mucho que ver con ella. Me conoce muy bien y es una gran consejera. Por esa razón es un proyecto que quiero mucho, en el que estoy más involucrado por ser una apuesta casi personal. Cuesta el madrugón: luego de las 9 vuelvo a mi casa, duermo una siesta y retorno para hacer a las 13 el programa en Continental. -Es una alternativa entre la AM y algunas propuestas de FM. -La FM está más distendida y el responsable de esto es Roberto Pettinato. Tengo la ilusión de que nos escuchen a nosotros dos más que a nadie. Pero en verdad debo agradecer a la radio que me dejó en libertad elegir a los columnistas y los productores, algo fundamental a la hora del balance radial.

-¿Como es eso de competir a la mañana con Pettinato, que conduce por FM El show de la noticia también de 6 a 9, y trabajar con él por la tarde en Canal 13?

-Petti es un compañero de laburo, un amigo y me gusta que a los amigos les vaya bien. Se merece ir primero porque su programa es muy bueno. Y él cambió la historia de la mañana. Pero volviendo a la esencia, Mil horas es un programa decontracté a diferencia de Aire comprimido, que conduje en Rock & Pop, y que era muy duro informativamente, pero me dio una gimnasia periodística notable. De todas maneras, la gente me ve a mí y piensa que vengo con el Manifiesto Comunista en la mano, por el personaje de Duro de domar , pero la realidad es otra cosa, porque ese programa me ayudó a darme el concepto de show, a distenderme y divertirme.

-¿Imaginaste este devenir de comentarista deportivo a la conducción periodística?

-A medida que fue creciendo lo anhelaba mucho. Pero cuando me convocaron para Indomables no entendía cuál era mi rol, cuando uno de los invitados era Guido Süller. Luego todo cambió y lo sigo disfrutando mucho.

-Hablemos de Competencia, primera edición , en Continental.

-A diferencia de la tira diaria de las 19, ésta es más informativa, aunque que yo bajo línea también, dado que al haberme hecho al lado de Víctor Hugo Morales, tengo un parecido ideológico con él y una relación paterno-profesional. Es un hombre que me ha dado muchas oportunidades, que confió siempre en mí y aprendí a trabajar así en absoluta libertad. El programa es muy dinámico y resulta breve porque se habla mucho de fútbol, de todos los clubes y está todo ahí. Tengo el respaldo de la producción periodística de todo el equipo de Víctor Hugo y de la radio, que es muy sólido. Me acompañan en la producción Leandro Illia, nieto del gran ex presidente, y Julio Martínez, muy jóvenes, pero con talento y responsabilidad.

-¿Cómo definirías tu estilo?

-Yo soy medio kamikaze, medio mandado y a veces soy mi propia víctima, porque ciertas cosas pasan a mi pesar. -¿Cuánto hay de personaje y cuanto de realidad en usted? -En Duro de domar hay mucho de personaje que yo alimento a propósito. Pero yo no digo nada que no piense. Y en eso debo agradecerle a Diego Gvirtz, que permite trabajar con una libertad total. A mí no me gusta trabajar en la tele, me gusta trabajar en Duro de domar . -¿Qué es para vos la radio? -Es el mejor medio de comunicación que existe y me fascina trabajar en ella. En la radio se ayuda a pensar y a corregir. En la tele te equivocás y después te escrachan en todas partes. En la radio te equivocás y decís: "Perdón, me equivoqué".

-Además de Víctor Hugo, ¿admiras a otras figuras radiales?

-Me gusta Jorge Lanata. Tuve la fortuna de trabajar con él en Del Plata. Es un monstruo. También, por supuesto, admiro a Pettinato, a la Negra Vernaci, a Fernando Peña. -No son pocos los que se inician en el deporte y siguen en lo periodístico. -Me parece que hay un hecho clave en el periodismo deportivo que se llamó Sport 80. Veníamos de La oral deportiva , que era muy distinta porque la palabra central siempre la tenía José María Muñoz, a quien respeto y escuché toda la vida. Pero Sport 80 empezó a opinar y a cuestionar. Hicieron escuela allí Víctor Hugo, Marcelo Araujo, Fernando Niembro, Alejandro Apo, Adrián Paenza, Diego Bonadeo y Néstor Ibarra. Ellos ayudaron a pensar en otros temas, no sólo en la pelota. A entender que fuera del fútbol hay vida y que el fútbol no es más importante que el pibe que pide en la 9 de Julio. Víctor Hugo y Néstor Ibarra hicieron la mejor cabina de radio que yo recuerde. También me acuerdo que se acercaban las elecciones de 1983, fueron con una urna a cada estadio e hicieron votar a todos los jugadores. Era el universo futbolístico y también otros hechos tanto o más trascendentes que lo netamente deportivo. Todos somos hijos de Sport 80 . Algunos salieron buenos y otros no.